Esta frontera natural del norte de la península, es el destino perfecto para aquellos que quieran disfrutar de una escapada en verano respirando el aire puro de las alturas.
Cuando llega la época estival, en las altas montañas la naturaleza brilla con mil colores, mientras que los animales se dejan ver por los valles. En esta época del año, los animales salvajes como la cabra montés y la gamuza son más visibles en las laderas empinadas. En el aire, el águila real rompe con regularidad el silencio con su grito. Numerosas rutas de senderismo y ciclismo ofrecen, hoy en día, acceso al paraíso natural virgen, que se encuentra en el Valle de Aosta, Piamonte, Lombardía o en los Dolomitas.
Via Alpina es un sitio web que le informa de los senderos que atraviesan los Alpes italianos. Estos recorridos a menudo son transfronterizos y ofrecen la oportunidad de moverse a Francia o Suiza. Otras atracciones de los Alpes italianos son los lagos que forjan un paisaje encantador. En Lombardía, el lago de Como ha dado nacimiento a pequeños pueblos pintorescos como Lenno o Lecco. El otro lago mítico de la región está en el Piamonte, es decir, el lago Maggiore (Lago Mayor).
Si decide acercarse a los lagos alpinos, un corto viaje en barco a lugares inaccesibles es una forma original de disfrutar de la belleza de Italia. Durante sus salidas a la naturaleza, no pierda la oportunidad de fotografiar los hermosos paisajes.
Si busca emoción, el parapente es una actividad a considerar. Maniva, Rodella y la llanura de Castelluccio son algunos de los sitios más espectaculares. Regiones como Oulx también ofrecen pistas para quads.